El Papa Francisco invita por primera vez a toda la Iglesia a celebrar una Jornada Mundial de los Pobres, con la intención de que todos los cristianos seamos conscientes de que el amor a los pobres está en el corazón del Evangelio, y por tanto de la Iglesia, y de que vivir la pobreza evangélica es absolutamente necesario para ser coherentes con nuestra fe y con el ejemplo del Señor. El Papa nos invita a llevar a la oración estas intenciones, ya que sólo con la gracia de Dios podremos vivir estos ideales y sembrar entre los hombres las semillas de un mundo nuevo, del Reino definitivo de amor y justicia.
Desde el Evangelio de Jesús nuestra relación con los pobres y con la pobreza y las actitudes que debemos tener quedarían marcadas por los siguientes verbos: ESCUCHAR, ACOGER, COMPARTIR, REZAR, TRANSFORMAR, DEJARNOS TRANSFORMAR, AGRADECER. Sí con los pobres contra la pobreza