Solemnidad de los SANTOS PEDRO y PABLO, apóstoles

Hoy celebramos con alegría la solemnidad de los santos apóstoles Pedro y Pablo, columnas fundamentales de la Iglesia. Ambos, con caminos distintos pero unidos por la fe en Cristo, dieron su vida anunciando el Evangelio. Las lecturas de hoy nos recuerdan cómo Dios actúa poderosamente en la vida de quienes confían en Él. En los Hechos de los Apóstoles, Pedro es liberado milagrosamente de la cárcel, una señal clara de la protección divina. Pablo, en su carta a Timoteo, reconoce que su vida ha sido una entrega total y que lo espera la corona de justicia. En el Evangelio, Jesús confía a Pedro las llaves del Reino de los cielos, dándole una gran responsabilidad en la Iglesia. Que este día nos inspire a renovar nuestra fe y nuestra misión como cristianos, sabiendo que, como Pedro y Pablo, también nosotros somos llamados a dar testimonio del amor de Dios con valentía y esperanza.

DOMINGO DEL SANTÍSIMO CUERPO Y SANGRE DE CRISTO

DOMINGO DE SANTÍSIMA TRINIDAD

DOMINGO DE PENTECOSTÉS

VII DOMINGO DE PASCUA. ASCENSIÓN DEL SEÑOR

VI DOMINGO DE PASCUA

Este VI Domingo de Pascua, las lecturas nos invitan a vivir en comunión y guiados por el Espíritu Santo. En la primera lectura, vemos cómo los apóstoles, con la ayuda del Espíritu, toman decisiones para el bien de todos, evitando imponer cargas innecesarias. El salmo es una alabanza universal que nos recuerda que toda la tierra debe alegrarse en Dios. En el Apocalipsis, se nos muestra una visión de esperanza: la ciudad santa, luminosa y sin necesidad de templo, porque Dios mismo es su luz. Finalmente, en el Evangelio, Jesús promete a sus discípulos la ayuda del Espíritu Santo, que les enseñará y recordará todo lo necesario para seguir caminando en la fe. Estas lecturas nos animan a confiar en el Espíritu, a vivir con alegría y a reconocer que Dios está presente, guiándonos con amor y sabiduría. Que esta palabra fortalezca nuestra fe y nuestra comunidad.